Horizonte Político

El presidente de la Camara de Diputados de la Nación y precandidato presidencial, Julián Domínguez, viajó en representación de la Presidenta a la ceremonia de ordenación de veinte cardenales. Ayer, fue recibido nuevamente por el papa Francisco.

El papa Francisco había dejado trascender que no recibiría en el Vaticano a precandidatos presidenciales durante el año electoral. En cambio, el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, viajó hasta Roma en representación de la presidenta Cristina Kirchner para la ceremonia de ordenación de 20 cardenales, incluyendo al arzobispo de Tucumán, Luis Villalba.

"Siempre los encuentros con el Papa reconfortan el espíritu y convocan a seguir trabajando por el bien común del país", sostuvieron a la salida de la reunión.

Desde Roma, Domínguez reiteró el apoyo a Cristina Kirchner a propósito de la marcha convocada para mañana y el requerimiento realizado por el fiscal Gerardo Pollicita. "Ningún otro gobierno realizó tantos esfuerzos para que el atentado a la AMIA fuera debidamente esclarecido y sus culpables reciban castigo", consideró. Respecto de la imputación, dijo que es una medida que pretende dañar a CFK y que el escrito "es una novela de hechos que no existieron".

Por otro lado, Domínguez apuntó que "no es la primera vez que se formula un requerimiento de instrucción en el que se denuncia a la Presidenta, sin que tal episodio haya generado las manifestaciones exacerbadas e histéricas que tanto la oposición como los medios periodísticos concentrados le pretenden asignar a la situación".