Horizonte Político

El titular de la UOCRA matancera afirmó que, con la gestión macrista, el sector tiene unos 3.000 trabajadores menos y, a nivel nacional, otros 60.000. “Estos años, la obra pública estuvo, prácticamente, parada; si hubiera habido, no tendríamos tanta desocupación ni inundaciones”, aseveró.

La crisis económica es muy dura y, con índices negativos que se replican en forma sostenida en todos los rubros del sector productivo, no parece que haya un repunte. En esa línea, los pronósticos de las consultoras y los especialistas coinciden en que, con viento a favor, la mejoría tardará más de un año en llegar.
Uno de los sectores afectados por el difícil contexto es el de la construcción. En diálogo con El1 Digital, el titular de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) de La Matanza, Heraldo Cayuqueo, dio cuenta del presente y responsabilizó, principalmente, al Gobierno nacional por las decisiones políticas y económicas adoptadas.
En ese sentido, aseguró que, “en La Matanza, en los últimos cuatro años, se perdieron alrededor de 3.000 puestos de trabajo en el sector” y que el número es mucho mayor a nivel nacional, llegando a “más de 60.000”. “De unos 450.000 afiliados que teníamos, ahora, estamos en unos 380.000”, agregó.
También, hizo hincapié en que, durante la gestión macrista, “la actividad cayó más de 30 por ciento”. “Pensábamos que, como se anunciaban tantas obras, la actividad iba a aumentar, pero todo quedó en anuncios, porque no se invirtió a nivel nacional ni a nivel provincial”, aseveró.
Endeudamiento y falta de obras
En esa línea, Cayuqueo sostuvo que el dinero prestado al país por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), de más de 52.000 millones de dólares, no fue utilizado para lo que se esperaba por parte de la población: “El Gobierno se endeudó un montón y eso no se vio reflejado en obras”.
“Estos años, la obra pública estuvo, prácticamente, parada. Hubo unas dos obras que, a cuentagotas, se fueron haciendo y el Metrobus se empezó y se paró”, añadió, y concluyó: “Si hubiera habido obras, no hubiésemos tenido tanta desocupación ni inundaciones. El dinero prestado, lamentablemente, fue para la timba financiera y no para producir”.